El Puerto de Santa María tiene la bonita costumbre de ver y recibir a viajeros procedentes de varias partes del mundo desde incluso antes de Cristo. Esta característica está marcada en una leyenda que involucra directamente a Menesteo, rey ateniense y participante de la guerra de Troya y que tras el asalto de su trono tuvo que navegar con rumbo desconocido. Fue (casualidades de la vida) la desembocadura del río Guadalete su última morada y es donde fundó la ciudad como el Puerto de Menestheo.
Echando a volar la imaginación, no dudo que se haya enamorado de esta tierra privilegiada que no sé cómo, sabe convencer y atrapar a sus visitantes que como yo encuentran un algo o pedacito de sus orígenes en El Puerto.

Yacimiento arqueológico de Doña Blanca
Volviendo a la realidad y con evidencias, la ciudad tiene orígenes muy diversos desde la era del Paleolítico inferior cuyo testigo principal es el yacimiento ‘El Aculadero’ pasando por ‘Las Arenas’ (yacimiento del Mesolítico) y épocas fenicias. Y, es precisamente en este último donde me quiero detener más, porque la agenda #ForumElPuerto lo incluía (muy buena elección).
Así visitamos el yacimiento arqueológico de Doña Blanca. Gracias a estudios y excavaciones se encontró un poblado fenicio que data de finales del siglo IX e inicios del siglo VII a. C. Es justo aquí donde me quedé boquiabierto porque pudimos ver restos identificables de casas de aquellas épocas, murallas, y además hay una necrópolis en la zona de la Sierra de San Cristóbal.
Asimismo, la guía nos explicó que prácticamente el agua del mar llegaba hasta escasos metros de distancia (ahora mismo es tierra ganada que consiste en una amplia llanura de marismas y salinas formada por depósitos aluviales del Guadalete). Incluso, hay ciertas evidencias que era un puerto muy importante en rutas comerciales en la bahía de Cádiz. Por todo esto, este enclave es una visita imprescindible de lo que hay que ver en El Puerto de Santa María (y de entrada, gratuita).


Castillo de San Marcos
Ya en épocas más recientes, El Puerto también tiene su origen romano, pasando por un periodo andalusí cuya presencia se puede notar en varios lugares de la ciudad como en el interior del Castillo de San Marcos cuya visita es un must y no seré yo quien te lo cuente todo (¿es broma?) aunque es en serio lo que te digo. Que es un lugar para no perderte y así conocer in situ la historia (d.C.) de la ciudad.
Salí embobado de este recinto porque tiene una historia digna de una serie con varias temporadas en alguna plataforma como Netflix hasta llegar a lo que ahora es las Bodegas Caballero (historia vinícola de El Puerto y actuales propietarios del recinto). Con este último dato quiero decirte que la experiencia ‘castillo más bodegas de vino’ es un detonante positivo porque estoy seguro de que disfrutarás con el tour. Y, como información adicional, no te pierdas en comprar y por supuesto probar su ‘vermut Lastau rojo‘.


La historia del castillo está muy ligada a Alfonso X El Sabio, quien en 1260 conquistó la ciudad a los musulmanes. Desde allí la mezquita (tienes que ver su mihrab de más de 700 años) pasó por varias transformaciones que perduran hoy en día. Una de sus joyas es su capilla (de la Virgen), la más antigua de El Puerto de Santa María.
Saliendo de allí es preciso viajar ya a épocas más medievales que la ciudad también tiene más que contar, porque está ligada al descubrimiento del Nuevo Mundo cuyo protagonista es Cristóbal Colón quien estuvo por estos lares en 1493 preparando su segundo viaje ¿recuerdas la carabela ‘la Santa María’? Pues es lo que estás pensando. El origen del nombre se atribuye a la ciudad. Cómo dato muy importante a recordar es que en El Puerto de Santa María es donde se fecha el primer mapa que incluye a las Américas en el año 1500.


La ciudad de los 100 palacios (¿y de 400 patios?)
Dado los anteriores acontecimientos, El Puerto de Santa María cobró una importancia dentro de la actividad comercial que venía del ‘Nuevo Mundo’.
Es así como, al ser prácticamente el primer contacto, la ciudad pasó a ser muy atractiva para el asentamiento de grandes comerciantes. Ese estatus se pudo notar principalmente en sus astilleros, instituciones de comercio, así como en la formación de marineros y navegantes lo que llevaron a situarla en una ciudad muy próspera.
Producto de esa bonanza comercial surgieron una serie de lujosas viviendas que llegaron a conformar un conjunto monumental catalogado como ‘Casas-Palacio’ también llamadas Casas de Cargadores de los que aún podemos disfrutar en su mayoría como la bien conservada ‘Casa de los Leones’ (del siglo XVII) en la calle Placilla, 2. Con tan solo ver su fachada que mantiene su diseño barroco original, te quedarás maravillado.
Si quieres ahondar más en esta maravilla, recuerda hacerte con el tour de Cargadores de Indias disponible en español.


Por estas últimas construcciones es que hoy en día sea bautizada o tenga el apodo de ‘La Ciudad de los 100 palacios’ con muchas curiosidades que uno va aprendiendo. Por ejemplo, si una de esas casas-palacio tenía rejas exteriores en plantas superiores es porque allí vivía o dormía una niña (así se evitaba un posible secuestro). O que algunas casas tienen torres vigía para desde allí vigilar la llegada de sus embarcaciones. Sin duda, cada construcción seguía un hilo conductor de una u otra manera.
Estas también están conectadas a que la ciudad también podría ser considerada como ‘la de los 400 patios’, una maravilla que habla de unas costumbres (de vivir en una sola familia o patios de casas de vecinos) que perduran hasta el día de hoy, aunque algunos ya convertidas en alojamientos boutique como la Casa n° 6, cuyo patio te hace como retroceder en el tiempo. Para ahondar en más detalles tan solo entra a esta web de la Asociación Cultural Amigos de los Patios Portuenses.


Gastronomía de la de siempre (y también la de ahora)
Esta publicación no puede ni debe cerrarse sin antes mencionar a algo qué siempre me conquista (y así lo creo). Y no es nada más ni nada menos que a probar la exquisita gastronomía de la ciudad. En la variedad está el gusto y aunque en El Puerto de Santa María puedes encontrar y comer de lo clásico aunado a buena calidad que siempre se agradece como el cocedero Romerijo (donde se come de lujo y con una historia de casi 70 años) hay nuevas propuestas de la ciudad que sin olvidar sus tradicionales ingredientes apuestan por dar un giro de tuerca (sin exagerar) como Bespoke, restaurante acogedor ubicado a unos poquísimos pasos del Soho Boutique Hotel Puerto (con habitaciones muy cómodas y desayuno variado).


Ahora que lo recuerdo, también hicimos dos paradas muy importantes, la visita al mercado de la Concepción para sentir el murmullo de la cuidad a través de lo que se cuece allí (compré 250 g de delicioso chicharrón de cerdo en uno de sus puestos) y el bar Vicente Los Pepes con un ambiente fenomenal donde a escritos a tiza de las de siempre, pude ver que tienen tapas, raciones y menús muy tentadores. De todas maneras, alrededor del mercado hay una buena variedad de establecimientos para comer delicioso.
Hay más…en El Puerto de Santa María
Ya para terminar. No dejes de caminar y ‘perderte’ por el casco histórico de El Puerto de Santa María y además experimentar su vida nocturna por allí mismo y la zona que va muy cerca de la Fuente de las Galeras y la Calle Ribera del Marisco donde vibrar en un ambiente fabuloso con animados bares y restaurantes.



De tener más tiempo, es buena idea dar una vuelta por Puerto Sherry, de los mejores puertos deportivos de España que con su faro y murales que llaman muchísimo la atención, no faltarán las fotos a doquier. Y si hay hambre y sed, pues también hay coquetos bares y chiringuitos que invitan a pasar y relajar nuestras mentes y cuerpos. Un plus que conquistó mi corazón es un espectáculo de atardecer que me dejó lelo de tanta belleza (y no es un cliché). Desde allí se ve Cádiz (la tacita de plata) que va tomando su forma nocturna conforme las luces se van encendiendo.


Bonus track
Todo lo que ver en El Puerto de Santa María da para más. Por eso, te invito a ver las Stories (enlace directo aquí mismo) que he ido compartiendo durante el #ForumElPuerto. Esta misma etiqueta te llevará a ver más publicaciones de mis compañeros de este viaje y de otras ediciones porque cómo diría Rafael Alberti (portuense de nacimiento) ‘la ciudad es como una casa grande’ y yo añadiría ‘donde todos sin excepción son muy bienvenidos’.